Mucho pan mucho vino, mucho aceite mucho tocino. Y de ahí al resto de la gastronomía manchega
ANTONIO ALFARO ///
@antoni0alfaro
Si por algo se conoce a Castilla La-Mancha es por su gastronomía. Hasta ahí llegamos todxs. Pero hoy, desde La Corte, este buen insider os viene a contar toda la magia de unos platos que combinan a la perfección tradición y buen gusto. Eso sí, y, por favor, siempre recordando su origen.
Lo de romantizar el campo y su tranquilidad está de moda; pero también es frío, carga con muchísimo trabajo y, en su memoria, mucho aislamiento y pocas oportunidades.
Anyway, te puedes venir y darte el deleito cuando te apetezca. Porque en la mancha manchega, la clave está en la elaboración: lenta, cuidada, y respetando mucho el producto. Desliza que te apunto unos cuantos.
1. Ajo mataero
Quizá no es el plato que mejor pinta tenga del mundo, pero es súper heavy. Te lo puedes comer mojando pan, o untando unos torreznos en esta mezcla (ñam). Se elabora, básicamente, friendo un hígado de cerdo y ajos en grasa de cerdo y pimentón, triturándolo y mezclándolo con harina o miga de pan en una sartén. Se sirve con piñones encima y tiene consistencia de puré. Te juro que es una locura.
2. Atascaburras
El nombre me ha hecho tanta gracia desde que era pequeño, que bueno, qué divertido escribir ahora de esto. El atascaburras, para sorpresa de muchos, es un plato que lleva pescado. Históricamente se comía cuando nevaba o hacía mucho frío, y es simplemente un puré de patata a full de bacalao salado desmenuzado, nueces, ajo, huevo cocido y aceite de oliva. Los reales sabrán que se come directamente del mortero.
3. Migas ruleras
Las migas ruleras son un plato súper cute, porque básicamente es cocina de aprovechamiento. Se elabora con pan duro, y se fríe en la sartén mezclado con chorizo, tocino de cerdo, jamón picado, dientes de ajo enteros (y con la piel, please), aceite de oliva y pimentón. La clave es pillarle el punto al pan, que hay que desmigarlo en la sartén mientras se tuesta todo lo que se pueda. Se come además con fruta, yo siempre con uvas, pero también puedes probar con granada o melón. Un diez, amore.
4. Gachas
Para mí, cuando hay gachas hay fiesta. Esto es así. Se trata de una especie de papilla que se prepara con harina de almortas (importante esto) y un poco de agua, y a la que se le añade panceta de cerdo, ajos, pimentón, aceite y sal. Te habrán sonado igual que las migas ruleras, pero te juro que no tienen nada que ver.
5. Gazpacho manchego
Los gazpachos manchegos son un guiso caldoso que se prepara con conejo, pollo o perdiz (o los tres a la vez) y cuyo elemento principal son las tortas cenceñas, que, básicamente, son una especie de tostas de trigo. También llevan caracoles y setas, y os juro que están para morirse.
6. Ajoaceite
Os juro que no sería nada en la vida sin el ajoaceite de mi madre. Esto también es una especie de guiso que se cocina con judías blancas, manitas de cerdo, patatas, huevos, ajos, puerros y aceite de oliva y sal. Por un lado se pone todo esto en la olla y se deja cociendo, y por otro se prepara un alioli que se acaba añadiendo al caldo del guiso. Como comprenderás esta es mi verdadera Combi Versace.
