Queridas modernas y modernos, inauguramos La Crème, una sección en la que recopilaremos los highlights del mes en cultura, gastronomía by @antoni0alfaro, es decir, esos temas guays que acaparan nuestro «Explora» de Instagram o «Para ti» de TikTok, para lxs más petit.
1. Lana del Rey en Coachella.
Para sorpresa de @nadie esto tenía que estar aquí.
Cuando se habla de hitos generacionales, y de artistas que inspiran a generación tras generación, para mí una de mis esenciales siempre ha sido Lana del Rey. Lleva sonando en mis cascos desde que tendría 12 o 13 años: me ha acompañado en todos los momentos de mi adolescencia y maduración, y de ahí hasta hoy en día.
Sí, o sea, sad boy desde que nací. Love her 4eva.
2. Vermuteria del Tano, Barcelona.
Pese a llevar dos años en Barcelona, todavía estoy en búsqueda de mi bar de confianza (soy mucho de eso), de llegar a la mesa, que te sonrían y ya sepan qué ponerte en la mesa.
Hace unas semanas, con la visita de unas amigas, acabamos en esta vermuteria en el barrio de Gràcia y, honestamente, estoy totalmente obsesionado con ir allí. Es un sitio de estética bastante tradicional, de esos que aún tienen platos colgados en las paredes, vermut casero y unas gildas picantitas que te mueres. En fin, si puedes tienes que pasarte.
3. Hanna Antonsson
Lxs que me conozcan bien sabrán que tengo un miedo bastante irracional con que en cualquier momento una paloma sobrevuele mi cabeza o se choque en mi cara. Eso sí, con la obra de Hanna Antonsson, este último mes, me he vuelto loco.
4. Cristina Len – TMLM
Tan solo una chica del ahora hablando del luto, de sus raíces, del miedo, del frío del campo y de sentir que todo acaba en algún momento.
Este mes me han pasado muchas cosas, pero de fondo o en los cascos siempre ha estado sonando ahí. TMLM son las siglas de Todo Menos La Muerte. Y tanto que es así. Cris, un besito desde aquí.
5. Restaurante Los Martínez, Tinajeros, Albacete.
Supongo que si eres de Albacete o simplemente manchegx y estás leyendo esto sabrás de qué restaurante hablo.
Está en Tinajeros, que es un pueblo muy muy pequeñito y lleva abierto desde, literal, 1969. Solo se cocinan platos manchegos tradicionales y os juro que no será el sitio más bonito del mundo pero la comida es espectacular. Este abril han dado el toque porque cierran definitivamente, así que las semanas que bajé a la tierra aproveche y me pasé. Si todavía no habéis ido os animo a que os paséis, jurao.
6. Canto yo y la montaña baila, de Irene Solà.
No os voy a engañar, me lo acabo de empezar. No es un libro nada extenso, así que probablemente me lo acabe en poco tiempo, y me está gustando tanto que tenía que estar aquí.
Por trabajo, y porque al final me paso el día editando y escribiendo textos, había perdido la costumbre de leer; pero estoy de vuelta. En cuanto acabe este empezaré con Te di ojos y miraste la tinieblas, que también es de Irene, así que ojalá pueda contaros qué tal en los favoritos del mes que viene.
